Verde Esperanza Custodiada Por Campanilleros...
Entre sones de Campanilleros aparece con elegancia y mesura nuestra Virgen De La Esperanza, caminando con dulzura entre bambalinas que se mezclan con el incienso y el azahar, para que camine tranquila, mirándonos con esa dulzura...
El racheo de los costaleros que cargan con el peso de tu amargura, derraman una lágrima más al ver tu cara de pena, al saber que tu hijo va de camino a la muerte, y no podrás hacer nada que mantener tu Esperanza hasta el momento final, donde tus besos serán nuestro último consuelo al verte sonreir timidamente entre bambalinas...
Cuando te tengo cerca, es como si el mundo se parara delante de tí, como si el tiempo se detuviera para ver tu cara, tu elegancia, para verte a ti, Esperanza, y ver como el incienso se mezcla entre la luz de las velas que rodean tu cara, dándole un toque de majestuosidad. Todo a mi alrededor se para, hasta el sonido se apiada de mis lágrimas al verte pasar, ya que sabe lo mucho que te quiero, y que gracias a tí, sigo aquí, sigo vivo, y por muchos años que tenga, y esté donde esté, vendre a verte como cada Miércoles Santo para verte pasear con tu gente y con ciudad, la que te quiere y te reza cada noche....
Tengo envidia de los marineros, ya que te tienen como patrona, y yo al sentirte mi salvación, mi refugio en noches vacías de silencio, pienso en tí y en la dulzura de tu mirada, y todo cambia, todo es diferente.... Ya cuando llegas a Virgen De La Esperanza Coronada veo como tu palio se mece entre el manto de pétalos que rodean tu silencio, para que puedas caminar entre rosas, para que tu pueblo te vea caminar tranquilamente, y cuando te veo que ya te vas para tu casa un año más, me muerdo mis últimas lágrimas de impotencia al saber que queda todavía un año para poder volverte a ver pasear tu elegencia y tu belleza por toda Huelva....
Y rompo a llorar al ver que no quieres entrar, que no te quieres despedir de nosotros, pero al final con resignación, nos bendices con Esperanza hasta el próximo año que te veamos pasear entre las calles de Huelva...
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