Recuérdame Que Te Odie, de Alex De La Iglesia.


Título: Recuérdame Que Te Odie.
Autor: Alex De La Iglesia.
Páginas: 234.
Editorial: Planeta.
ISBN: 9788408126300.
Precio: 19,00 €.

Tengo que reconocer que soy un gran admirador de este hombre y de su filmografía y por eso cuando descubrí que había publicado un libro estaba decidido a leerlo y a disfrutar de una gran novela, a la espera de su próxima novela, pero de hecho no ha sido así y es una lástima.


Bruno Kosowski, un dibujante de cómics emocionalmente desequilibrado, ha desaparecido. Cuando su editor, el neurasténico e irritable Rubén Ondarra, entra en la casa, encuentra que el piso está inundado. Rubén decide entonces investigar su desaparición buscando claves en los objetos que Kosowski tiene en su mesa, entre ellos el misterioso grabado de Durero Melancolía 1. Comenzará entonces para Rubén una peligrosa carrera por el Madrid más demente para intentar hacer que encajen todas las piezas del rompecabezas.


Leyendo la sinopsis, y siendo fan de sus películas, te dan más ganas de leer la novela y descubrir su faceta de escritor, pero nada más lejos de la realidad. Pese al brutal potencial que la novela pudiera haber tenido, se convierte en un auténtico despropósito literario. En ciertos momentos de la novela piensas que escribe por escribir y sin sentido alguno solo para rellenar páginas y páginas para darle un volumen decente, que ni así consigue, ya que parece más bien un cuento que una novela, aun así, en ciertos momentos aparece el Alex de la Iglesia que yo esperaba y nos hace disfrutar en ciertos momentos que, viendo la novela, hasta se agradecen.

La novela deja de tener lógica en ciertos momentos y sale del paso como buenamente puede y sin que el lector se de cuenta, y puedes perder fácilmente el hilo de la historia con las paranoias del protagonista, que en ciertas situaciones, resultan demasiado pesadas y repetitivas. Con un final que realmente salva la historia y con un personaje secundario que debería haber sido el protagonista, la novela va de más a menos con un final que sorprende. En definitiva es una novela para leer y olvidar, no quedará en tu memoria como obra de arte. Cabe decir que esto de la literatura es cuestión de gustos, pero prefiero ampliamente al director que al escritor.


Nacido en Bilbao en 1965, es dibujante de cómics desde los diez años y reconoce que sus padres espirituales son Alex Raymond, Stan Lee y Vázquez. Se licenció en Filosofía por la Universidad de Deusto, donde, según él, frecuentó el bar y el cineclub fundamentalmente. Tras varios trabajos en el mundo del espectáculo como director artístico, en 1991 dirigió el cortometraje Mirindas asesinas, que sirvió para que Pedro Almodóvar se animara a apadrinar su primer largometraje, Acción mutante (1993). Desde entonces ha rodado películas tan emblemáticas para el cine actual como El día de la bestia (1995), Perdita Durango (1997), Muertos de risa (1999), La comunidad (2000), 800 balas (2002), Crimen ferpecto (2004), Películas para no dormir: la habitación del niño (2006) y Los crímenes de Oxford (2008)


* Payasos En La Lavadora.

Ahora pondré la nota que, bajo mi punto de vista, merece esta novela.


Un saludo para todos.

1 comentario:

  1. Acabo de leer otro post sobre este libro, ahora ya me hago una idea más clara.
    Un saludo!

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