La Bogeria del Cine | La colina de las amapolas

 

Título
: La colina de las amapolas

Director: Goro Miyazaki

Año: 2011

País: Japón

Duración: 91 minutos

Presupuesto: $22,000,000
 
Recaudación:$61,487,846



_SINOPSIS_
 
 

Japón, año 1963. Umi Matsuzaki es una estudiante de instituto que, en ausencia de su madre, cuida a sus dos hermanos y de su abuela a la par que administra un hostal de estilo occidental, el Coquelicot Manor, en lo alto de una colina y cercano al mar. La chica compagina tranquilamente sus responsabilidades con su vida escolar. Un día conoce a Shun Kazama, miembro del club de periodismo, y Shiro Mizunuma, presidente del consejo de estudiantes. Ambos son representantes del Quartier Latin, un edificio antiguo que alberga las diferentes asociaciones de estudiantes y que corre el peligro de ser demolido.


 _OPINIÓN PERSONAL_ 

 

Goro Miyazaki se resarce de su desastrosa Cuentos de Terramar y nos entrega, esta vez sí, una película del estudio Ghibli y su sello. En esta ocasión nos encontramos en Japón y volvemos a ver, una vez más, los valores que siempre se pregonan en ellas. La Colina de las Amapolas nos cuenta la historia de un edificio ocpuado por los estudiantes del colegio que se encuentra en pésimas condiciones y que, ante la perspectiva de ser demolido por el director y dueño del colegio, hace que los jóvenes se activen y lo remodelen. Una vez más, el sentimiento de tradición, en esta ocasión, centrado en un edificio antiguo vuelve a ser el centro de atención del estudio. 



Vemos como los chicos se esfuerzan en mejorarlo todo y renovarlo casi al completo mientras vamos la conociendo la historia de Umi, Shum e Shiro que va evolucionando según va mejorando el mismo Quartier Latin. El problema viene cuando la amistad puede ir a más y, claro, en este tipo de películas siempre pasa. Siempre tenemos que tener una historia de amor o amor imposible. Tan innecesario como tópico en casi todas las cintas de animación, sea de Ghibli o de algún estudio occidental. A pesar de todo, la cinta sabe guiarla de una forma con sentido que no chirríe demasiado.




Miyazaki da con la tecla y nos entrega una película bastante superior, unida a la brillante animación de Ghibli nos encontramos con una película bastante buena en términos generales. Una hora y media de disfrute, o casi en su totalidad. Evitando ciertos momentos, La colina de las amapolas es un gran repaso por la madurez en la que se vuelve a poner en valor la historia de Japón y todo lo que han sufrido a lo largo de tantos años visto de diferentes prismas siendo, ninguno de ellos, prescindible. 




En definitiva, una cinta que mantiene el nivel y que está entre mis favoritas del estudio. No llega a ser perfecta ni mucho menos pero se nota que el director ha evolucionado desde aquella torpe Cuentos de Terramar y es una buena noticia para todos, tanto para Ghibli como para los amantes de este tipo de película de la que, por desgracia, cada vez hay menos exponentes visibles.
 

_VALORACIÓN_  

 8,7

No hay comentarios

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

Con la tecnología de Blogger.