El Primer Sueño, Interludio.
Carolina se sentía cansada. No entendía en lo que se estaba convirtiendo aquel rompecabezas, cada vez más extraño. Desde que tuvo aquel raro sueño y el descubrimiento de aquel diferente espejo que reflejaba todo menos su rostro. Los sueños habían ido a peor, y tenía miedo de que se hicieran reales. Sentada en su habitación, miró el espejo de donde había surgido aquella carta que la tenía desconcertada. Se recostó en la cama y suspiró lentamente. No tenía previsto que la vida le cambiara tanto en tan poco tiempo, y estaba segura que todo aquello estaba esperando.
El hallazgo de la cruz de tinta en aquella carta le había dejado descolocada, además de dos fechas que no sabía a quién pertenecía y porqué venían en la parte de atrás de la carta, las cuales estaban casi difuminadas por el agua en el que había sumergido la misma. Escuchó las voces de sus padres, los cuales acababan de llegar de estar todo el día trabajando. Pronto vendría su madre a preguntar como había pasado la tarde, ya tenía la excusa perfecta por haber pasado la tarde con su amiga, aunque no había sido una tarde normal.
La visión de aquella anciana con la niña había sido muy extraña. Aquella pequeña le había dicho que era una lástima que durara poco. Recordaba el sudor frío que había recorrido su espalda. Tras el primer shock había decidido ir a buscar a la anciana y preguntarle, pero se había quedado petrificada cuando se deshizo en arena. Había regresado a casa cabizbaja y pensando en todo lo que había pensado. Se quedó dormida, luchando porque no la venciera, pero le fue imposible. Morfeo acudió a por ella sin dejarle margen a nada.
El hallazgo de la cruz de tinta en aquella carta le había dejado descolocada, además de dos fechas que no sabía a quién pertenecía y porqué venían en la parte de atrás de la carta, las cuales estaban casi difuminadas por el agua en el que había sumergido la misma. Escuchó las voces de sus padres, los cuales acababan de llegar de estar todo el día trabajando. Pronto vendría su madre a preguntar como había pasado la tarde, ya tenía la excusa perfecta por haber pasado la tarde con su amiga, aunque no había sido una tarde normal.
La visión de aquella anciana con la niña había sido muy extraña. Aquella pequeña le había dicho que era una lástima que durara poco. Recordaba el sudor frío que había recorrido su espalda. Tras el primer shock había decidido ir a buscar a la anciana y preguntarle, pero se había quedado petrificada cuando se deshizo en arena. Había regresado a casa cabizbaja y pensando en todo lo que había pensado. Se quedó dormida, luchando porque no la venciera, pero le fue imposible. Morfeo acudió a por ella sin dejarle margen a nada.
Con tantas emociones es normal que se agote. Veo muy bien que hagas un pequeño resumen porque hacía tanto tiempo que no subías nada de esta historia que la gente necesita un pequeño empujón para retomar el hilo. ¿Qué soñará nuestra cada vez más confundida protagonista?
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