Que Se Pare El Tiempo, VII

Volvamos a parar el tiempo, volvamos a hacer todo eterno. Nada es tan importante que este momento para que queramos que el tiempo siga su cruel destino y siga consumiendo las horas del destino que pasaremos juntos. ¿Qué más da que juegue con nosotros? ¿Qué más da que el futuro sea al mismo tiempo nuestro presente? Vive el momento día a día y ojalá la vida te colme de momentos en los que des la vida por parar el tiempo. Nada hay más perfecto que ese instante en el que apagarías el sol por seguir con esa persona solo un instante más, solo un segundo más en el que todo lo que existiera fuera la mirada y los ojos de la persona que amas.

Que se pare el tiempo, podemos hacerlo, olvidemos el reloj en casa y salgamos a la locura. Vivimos atados a las horas, a las obligaciones, a la tensión y el estrés de la vida que cada día se nos hace más dura por los motivos que todos tenemos. ¿Harías esa locura? ¿Intentarías salir sin nada que te marque las horas y pensando solamente en disfrutar del día? Es algo increíble, créeme, que más da que el mundo se acabe si tu estás haciendo lo que te apetece en ese instante, qué te importa que los demás vayan corriendo a todos lados porque la hora le atenaza el cuello y los movimientos mientras tu caminas con soltura y sin una presión que nos fue impuesta por la sociedad. Siéntate en un banco, en un parque, mira a tu pareja y deja el tiempo a un lado porque el tiempo mejor consumido de nuestras vidas es el que pasamos junto a la persona que amamos.

Que se pare el tiempo, que nada más importa que tu felicidad, la que tu deseas y mereces. Párate ante el mundo y disfruta. ¿Qué puede pasar? La muerte nos va a recibir de la misma manera, con una sonrisa pero depende de ti el motivo de esa sonrisa pues puede ser de envidia por haber hecho con tu vida lo que realmente querías o de condescendencia al ver que perdiste tu vida atado a una sociedad que no se acordará de ti... ¿Cómo quieres que te sonría la muerte?

Ahora dime... ¿Paramos el tiempo?