Mundo Series | Sons Of Anarchy, temporada cuatro
Título: Sons Of Anarchy(Hijos de la Anarquía)
Año: 2011
Duración: 45/50 minutos.
Número de capítulos: 14
Temporadas: 7
País: Estados Unidos
Productora: FX Network and Productions
Reparto: Charlie Hunnam, Ron Perlman, Katey Sagal, Mark Boone Junior, Kim Coates, Tommy Flanagan, Mitch Pileggi, Maggie Siff, Theo Rossi, Ryan Hurst, William Lucking, Dayton Callie, Johnny Lewis, David Labrava, Taylor Sheridan, Ally Walker, Winter Ave Zoli, McNally Sagal, Titus Welliver, Adam Arkin, Paula Malcomson, Hal Holbrook, Q'orianka Kilcher, Emilio Rivera, Kurt Sutter, Danny Trejo...
_SINOPSIS_
Serie centrada sobre un club de moteros (MC) que operan ilegalmente en la ciudad ficticia de Charming (California). La historia se centra en el protagonista Jackson "Jax" Teller (Charlie Hunnam), un joven miembro de la organización, con rango de vicepresidente, que comienza a cuestionarse sus propios actos y los de su club.
Si tenía dudas de si la tercera temporada sería posible superarla, aquí me doy cuenta que, una vez más, me quedo sin palabras. La cuarta tanda de episodios nos muestra una capa más, si es que es posible, de muchos de los personajes que demuestra, de nuevo, la gran versatilidad y potencia que cada personaje guarda dentro. Si nos paramos a pensar en el cuarteto principal, véase Clay, Gemma, Jax y Tara, la bomba es de relojería. El peso lo llevan estos cuatro pero es que el resto no se queda atrás, dándonos grandes momentos para el recuerdo. Mi especial recuerdo y cariño para Tig y Opie.
Estos dos son grandes secundarios que, gracias a su grandísimo hacer en estos episodios, sus intrigas, personalidades y vida en general, hacen que brillen por encima cuando los principales están desaparecidos o fuera de combate. Esto hace que la temporada jamás decaiga y se vaya revitalizando conforme pasan y acabemos ganando todos. La introducción, y cameos, de personajes nuevos hacen también que disfrutemos de grandes tramas aunque se repitan ciertos clichés ya que, a pesar de todo, la premisa es bastante básica.
La gran personalidad que se imprimen con los personajes de Romeo o el fiscal Potter aportan esa genialidad para ver como el MC sigue esquivando golpes y más golpes. Si a ello le sumamos la gran rivalidad que sufren de forma interna viendo los distintos puntos de vista que tienen de llevar al club a algo más, esta serie se convierte en una auténtica delicia. Nos podríamos pasar a pensar en otros personajes, brillantes como casi todos, como Unser, Gemma o, en menor medida, Piney. Este último hace que la lealtad y la amistad suba un escalafón más en esta escalera hacia la excelencia que tiene Sons of Anarchy como meta.
Una vez más, me gustaría pararme en el grandísimo papel que Hunnam interpreta. Jax es ese demonio y ángel que se va cambiando de piel según la situación. Cada vez nos van dando más ganas de abrazarle y menos de darle un par de guantazos que le hagan despertar. Aunque el final comience a ser algo predecible, es realmente brillante ver como la empatía que sentimos hacia él hace que suframos y vivamos sus experiencias con más intensidad de la que hubiéramos deseando en los primeros episodios de la serie.
En definitiva, Sons Of Anarchy no mantiene el nivel de las temporadas pasadas, sino que lo supera levemente aunque no diría que es mejor que las anteriores. Es un nivel tan alto que, si nos paramos a buscar detalles, cada una de ellas tiene algo que nos engancha pero, para un servidor, mantienen un nivel brutal. Tan brutal que ha sido muy pocas veces visto en las cantidades ingentes de series que tenemos hoy día. Aún me queda la mitad de la vida de la serie, pero estoy claro que ya se ha convertido en una de mis preferidas de todos los tiempos, y con toda las razones de peso posibles.
_NOTA_
_OPINIÓN PERSONAL_
Si tenía dudas de si la tercera temporada sería posible superarla, aquí me doy cuenta que, una vez más, me quedo sin palabras. La cuarta tanda de episodios nos muestra una capa más, si es que es posible, de muchos de los personajes que demuestra, de nuevo, la gran versatilidad y potencia que cada personaje guarda dentro. Si nos paramos a pensar en el cuarteto principal, véase Clay, Gemma, Jax y Tara, la bomba es de relojería. El peso lo llevan estos cuatro pero es que el resto no se queda atrás, dándonos grandes momentos para el recuerdo. Mi especial recuerdo y cariño para Tig y Opie.
Estos dos son grandes secundarios que, gracias a su grandísimo hacer en estos episodios, sus intrigas, personalidades y vida en general, hacen que brillen por encima cuando los principales están desaparecidos o fuera de combate. Esto hace que la temporada jamás decaiga y se vaya revitalizando conforme pasan y acabemos ganando todos. La introducción, y cameos, de personajes nuevos hacen también que disfrutemos de grandes tramas aunque se repitan ciertos clichés ya que, a pesar de todo, la premisa es bastante básica.
La gran personalidad que se imprimen con los personajes de Romeo o el fiscal Potter aportan esa genialidad para ver como el MC sigue esquivando golpes y más golpes. Si a ello le sumamos la gran rivalidad que sufren de forma interna viendo los distintos puntos de vista que tienen de llevar al club a algo más, esta serie se convierte en una auténtica delicia. Nos podríamos pasar a pensar en otros personajes, brillantes como casi todos, como Unser, Gemma o, en menor medida, Piney. Este último hace que la lealtad y la amistad suba un escalafón más en esta escalera hacia la excelencia que tiene Sons of Anarchy como meta.
Una vez más, me gustaría pararme en el grandísimo papel que Hunnam interpreta. Jax es ese demonio y ángel que se va cambiando de piel según la situación. Cada vez nos van dando más ganas de abrazarle y menos de darle un par de guantazos que le hagan despertar. Aunque el final comience a ser algo predecible, es realmente brillante ver como la empatía que sentimos hacia él hace que suframos y vivamos sus experiencias con más intensidad de la que hubiéramos deseando en los primeros episodios de la serie.
En definitiva, Sons Of Anarchy no mantiene el nivel de las temporadas pasadas, sino que lo supera levemente aunque no diría que es mejor que las anteriores. Es un nivel tan alto que, si nos paramos a buscar detalles, cada una de ellas tiene algo que nos engancha pero, para un servidor, mantienen un nivel brutal. Tan brutal que ha sido muy pocas veces visto en las cantidades ingentes de series que tenemos hoy día. Aún me queda la mitad de la vida de la serie, pero estoy claro que ya se ha convertido en una de mis preferidas de todos los tiempos, y con toda las razones de peso posibles.
_NOTA_
9,6
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