Especial Al Pacino: City Hall
Título: City Hall
(La sombra de la corrupción)
Director: Harold Becker
Año:1995
País: USA
Duración: 117 minutos
Presupuesto: 40.000.000 $
Recaudación: 20,230,207 $
Reparto:
John Cusack, Al Pacino, Bridget Fonda, Danny Aiello, Martin Landau, David Paymer, Anthony Franciosa, Richard Schiff, Nestor Serrano, Lauren Vélez
_SINOPSIS_
John Papas, el alcalde de Nueva York, gobierna la ciudad a su antojo gracias a su elocuencia y a su indiscutible carisma. En un barrio negro, un niño resulta muerto en un tiroteo entre narcotraficantes y detectives de narcóticos. Cuando el narcotraficante detenido es liberado a las pocas horas, Kevin Calhoun, el idealista teniente de alcalde decide investigar el caso.
_OPINIÓN PERSONAL_
Una cinta que no ofrece nada nuevo salvo la confirmación que, aún teniendo buenos actores, un gran guion, el director puede echarlo todo abajo con su forma de dirigir. Cusack no convence en el papel protagonista y nos encontramos con un Pacino que está a medio gas y que solo despierta en el discurso de la iglesia. Por lo demás no encontramos nada que merezca la pena verla de nuevo, si es que hay que verla alguna vez.
Las dos horas se hacen poco soportables y es el que el ritmo llega a ser tedioso. Ninguno de los protagonistas nos transmite esa sensación de poder, de tensión, de vértigo de saber que todo puede irse a la deriva. Becker parece creer que los actores harán todo el trabajo por él y parece desentenderse en algunos momentos que acaban siendo para olvidar. Una cinta sin fondo ni trasfondo que podría haber sido una gran cinta si se hubiera aprovechado lo que tenían entre las manos.
Es difícil mantener la potencia en una cinta en la que no te imprimen nada que te haga agarrarte a ella. En ratos se hace soporífera y acabas despertando en la iglesia. Ahí es cuando vemos a Pacino en su mejor momento de la cinta. Parece despertar del letargo para ofrecer algo que se le da de maravilla. Hacernos sentir con su discurso. Es algo que hemos comprobado a lo largo de su trayectoria y surte más efecto de lo que se podría reconocer.
Ni el giro del final, esperable desde los inicios si conocemos las carreras de ambos, City Hall se diluye en tantos tópicos como es posible sin ofrecer nada nuevo al espectador. En definitiva, el batacazo en taquilla ya demuestra que no consiguió llegar al mínimo
_VALORACIÓN_
_OPINIÓN PERSONAL_
Una cinta que no ofrece nada nuevo salvo la confirmación que, aún teniendo buenos actores, un gran guion, el director puede echarlo todo abajo con su forma de dirigir. Cusack no convence en el papel protagonista y nos encontramos con un Pacino que está a medio gas y que solo despierta en el discurso de la iglesia. Por lo demás no encontramos nada que merezca la pena verla de nuevo, si es que hay que verla alguna vez.
Las dos horas se hacen poco soportables y es el que el ritmo llega a ser tedioso. Ninguno de los protagonistas nos transmite esa sensación de poder, de tensión, de vértigo de saber que todo puede irse a la deriva. Becker parece creer que los actores harán todo el trabajo por él y parece desentenderse en algunos momentos que acaban siendo para olvidar. Una cinta sin fondo ni trasfondo que podría haber sido una gran cinta si se hubiera aprovechado lo que tenían entre las manos.
Es difícil mantener la potencia en una cinta en la que no te imprimen nada que te haga agarrarte a ella. En ratos se hace soporífera y acabas despertando en la iglesia. Ahí es cuando vemos a Pacino en su mejor momento de la cinta. Parece despertar del letargo para ofrecer algo que se le da de maravilla. Hacernos sentir con su discurso. Es algo que hemos comprobado a lo largo de su trayectoria y surte más efecto de lo que se podría reconocer.
Ni el giro del final, esperable desde los inicios si conocemos las carreras de ambos, City Hall se diluye en tantos tópicos como es posible sin ofrecer nada nuevo al espectador. En definitiva, el batacazo en taquilla ya demuestra que no consiguió llegar al mínimo
_VALORACIÓN_
4
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