Undécimo Aniversario de Papel de Tinta Negra
Hoy Papel de Tinta Negra cumple 11 años de vida. He pensado mucho acerca de esta fecha y mil ideas me han rondado la cabeza, desde seguir al pie del cañón hasta cerrar con candado para siempre. Este sitio ha evolucionado mucho en la más de una década que sigue vivo, y eso es gracias a vosotros que, pese a todo, seguís apostando por ella.
Jamás pensé que la tendría tanto tiempo y que me ayudaría a cumplir tantos sueños. Lo que veía inalcanzable hace poco menos de una década hoy lo he cumplido con creces. Gracias a Papel de Tinta Negra he podido conocer a gente maravillosa, entre ellas mi pareja, y he podido entrevistar a ídolos de toda la vida. He descubierto, además, mi pasión por la lectura que se ha confirmado en estos años de aventuras y reseñas. Me he vuelto a enamorar del cine y pienso que ahí puede que esté el final del camino que quiero conseguir. Papel de Tinta Negra ha estado ahí en cada paso, en mi camino a la madurez.
Quería daros las gracias por seguir ahí, da igual si llevas leyendo una semana, dos años o toda la vida. Gracias. Gracias por perder parte de tu tiempo en leer mis textos, opiniones, críticas y entrevistas. Hay un duro trabajo detrás con el cual he disfrutado y aprendido muchísimo. Gracias a esos escritores y editoriales que apostaron por mi cuando la web no era nada, gracias a aquellos que me concedieron las primeras entrevistas a pesar de que no sabíamos que nos íbamos a encontrar. Gracias por apostar por mi.
Se avecinan tiempos complicados, la sociedad es un claro ejemplo de ello. Si os soy sincero, no sé cuánto tiempo durará más este camino. Allá por 2009 no esperaba tenerla más de un año o dos, así que no puedo confimaros un año más y mucho menos otra década. Me he planteado disfrutar de lo conseguido y seguir por el mismo camino por el que estoy disfrutando, aprendiendo y conociéndome un poco más, sea el tiempo que sea, apuesten por mí o no. Espero que hayan disfrutado de la web en algún momento y como escribió uno de mis autores favoritos, "la vida dura menos que un estribillo" así que, ¿por qué no hacer lo que nos gusta de verdad?
Jesús V.
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