La Bogeria del Cine | Cinema Paradiso
Título: Nuovo Cinema Paradiso(Cinema Paraíso)
Director: Giuseppe Tornatore
Año: 1988
País: Italia
Duración: 155 minutos
Guión: Giuseppe Tornatore
Reparto: Philippe Noiret, Jacques Perrin, Salvatore Cascio, Agnese Nano, Brigitte Fossey, Marco Leonardi, Antonella Attiu, Enzo Cannavale, Isa Danieli, Leo Gullotta, Pupella Maggio, Leopoldo Trieste
_SINOPSIS_
Narra la historia de Salvatore, un niño de un pueblecito italiano en el que el único pasatiempo es ir al cine. Subyugado por las imágenes en movimiento, el chico cree ciegamente que el cine es magia; pero, un día, Alfredo, el operador, accede a enseñarle al pequeño los misterios y secretos que se ocultan detrás de una película. Salvatore va creciendo y llega el momento en el que debe abandonar el pueblo y buscarse la vida.
_OPINIÓN PERSONAL_
Una de las obras de arte del género. Una carta de amor al cine por parte de Tornatore que nos ofrece una auténtico paseo por el cine de verdad. Seguimos la infancia y adolescencia de Salvatore, un pequeño enamorado del cine y de su funcionamiento que, después de mucho, consigue ver como se hace la magia de hacer una proyección. Alfredo, el encargado, tras las reticencias, se hace su maestro y le enseña todo lo que sabe. La tragedia hace que tenga que hacerse cargo de todo antes de lo necesario y es ahí cuando su amor al cine se despega.
Poco más de dos horas de un canto a la vida y a la ingenuidad que tenemos durante la primera parte de nuestra vida y como la vida va evolucionando hasta casi olvidar aquello que nos tenía enamorado hasta la médula por el paso del tiempo y de los años. Salvatore cambia conforme lo hace el pueblo y su forma de ver el mundo y vemos como todo ello no influye en su pasión por el cine, hasta que la tragedia vuelve a tomar parte de su vida.
No tengo nada en contra de la cinta ya que todo, desde actuaciones, guion, escenografía, escenario y todo aquello que puedas imaginar está cuidado hasta la perfección y es por ello que es una de las grandes obras maestras de la historia del cine. Si no te gusta Cinema Paradiso no te gusta el cine. Porque Nuovo Cinema Paradiso es el cine en estado puro, es una forma de ver la vida, de entenderla, de enamorarte y de evolucionar siempre con él a tu lado, en los peores momentos pero también en los mejores. La infancia desaparece y Salvatore ha olvidado todo aquello de lo que se enamoró hasta que se entera de la muerte del propio Salvatore.
Eso le hace regresar al pueblo tras haberse marchado y no haber regresado. Tenía familia que no había vuelto a ver ni casi a mantener el contacto lógico. Es entonces cuando empieza a rememorar aquella historia que había olvidado, o no, de su propia vida se vuelve a enamorar. Se intercala a la perfección la tragedia y la comedia y todo encaja brillantemente. Todo va surcando un camino hacia uno de los mejores finales que he visto en mi vida.
El final es el auténtico homenaje, es una oda a ese amor que sentimos todos los que necesitamos el cine en nuestra vida. Cinema Paradiso rinde el tributo perfecto para los amantes del celuloide. Es una obra de culto, un camino que seguir en busca del cine perfecto, el de verdad. Demuestra que el amor es eterno si es fiel y que por mucho tiempo que pase no lo olvidas, igual que no lo hizo Salvatore. Igual que no lo hacemos nosotros. Una vez termines la cinta, póntelo en bucle, disfrútalo. Un final absolutamente perfecto para una obra maestra. Al final de todo, solo me queda dar las gracias a Giuseppe Tornatore por esta obra cumbre que todos recordamos y que llevaremos en nuestro corazón mientras sigamos enamorado de esto que denominamos cine.
_VALORACIÓN_
_OPINIÓN PERSONAL_
Una de las obras de arte del género. Una carta de amor al cine por parte de Tornatore que nos ofrece una auténtico paseo por el cine de verdad. Seguimos la infancia y adolescencia de Salvatore, un pequeño enamorado del cine y de su funcionamiento que, después de mucho, consigue ver como se hace la magia de hacer una proyección. Alfredo, el encargado, tras las reticencias, se hace su maestro y le enseña todo lo que sabe. La tragedia hace que tenga que hacerse cargo de todo antes de lo necesario y es ahí cuando su amor al cine se despega.
Poco más de dos horas de un canto a la vida y a la ingenuidad que tenemos durante la primera parte de nuestra vida y como la vida va evolucionando hasta casi olvidar aquello que nos tenía enamorado hasta la médula por el paso del tiempo y de los años. Salvatore cambia conforme lo hace el pueblo y su forma de ver el mundo y vemos como todo ello no influye en su pasión por el cine, hasta que la tragedia vuelve a tomar parte de su vida.
No tengo nada en contra de la cinta ya que todo, desde actuaciones, guion, escenografía, escenario y todo aquello que puedas imaginar está cuidado hasta la perfección y es por ello que es una de las grandes obras maestras de la historia del cine. Si no te gusta Cinema Paradiso no te gusta el cine. Porque Nuovo Cinema Paradiso es el cine en estado puro, es una forma de ver la vida, de entenderla, de enamorarte y de evolucionar siempre con él a tu lado, en los peores momentos pero también en los mejores. La infancia desaparece y Salvatore ha olvidado todo aquello de lo que se enamoró hasta que se entera de la muerte del propio Salvatore.
Eso le hace regresar al pueblo tras haberse marchado y no haber regresado. Tenía familia que no había vuelto a ver ni casi a mantener el contacto lógico. Es entonces cuando empieza a rememorar aquella historia que había olvidado, o no, de su propia vida se vuelve a enamorar. Se intercala a la perfección la tragedia y la comedia y todo encaja brillantemente. Todo va surcando un camino hacia uno de los mejores finales que he visto en mi vida.
El final es el auténtico homenaje, es una oda a ese amor que sentimos todos los que necesitamos el cine en nuestra vida. Cinema Paradiso rinde el tributo perfecto para los amantes del celuloide. Es una obra de culto, un camino que seguir en busca del cine perfecto, el de verdad. Demuestra que el amor es eterno si es fiel y que por mucho tiempo que pase no lo olvidas, igual que no lo hizo Salvatore. Igual que no lo hacemos nosotros. Una vez termines la cinta, póntelo en bucle, disfrútalo. Un final absolutamente perfecto para una obra maestra. Al final de todo, solo me queda dar las gracias a Giuseppe Tornatore por esta obra cumbre que todos recordamos y que llevaremos en nuestro corazón mientras sigamos enamorado de esto que denominamos cine.
_VALORACIÓN_
10
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